Euro Final 8, el doble bronce de Italia con Países Bajos y Bélgica. Ferrari: “Italia en dos podios, orgullosa de estos chicos”

El grito de Alvarito Montiel resuena en la Plaza de Toros y se cruza con el de Flavio Abbate. Las lágrimas de ayer, imposibles de contener tras el partido perdido contra Portugal en semifinales, dejan paso a saltos, cantos y bailes con todo el equipo italiano. El punto decisivo de la pareja debutante, y sí, Italia ha vencido 2-0 a Países Bajos, colgándose un merecido bronce europeo. Una fiesta que llega justo antes de la del equipo femenino, porque en la pista de al lado el color azul también brilla: las italianas conquistan el tercer puesto contra Bélgica. El abrazo entre Carolina Orsi y Emily Stellato en el centro de la pista es la imagen más emotiva de un tercer puesto que confirma a la Italia femenina entre la élite del pádel europeo y mundial.

En la final masculina, la superioridad italiana fue evidente. En el primer partido, Aris «Potter» Patiniotis – como lo llama el grupo italiano, en referencia a la saga de J. K. Rowling – y Marco Cassetta solo dejaron tres juegos a Van Osptel y Nolten. En el segundo, otra muestra de fuerza de Abbate-Caruso, que cerraron 6-2, 6-4 para asegurar el bronce. Pero ojo, porque lo de Países Bajos sigue siendo un gran logro: nunca habían llegado tan alto. No es casualidad que el presidente de la FIP, Luigi Carraro, quisiera felicitar a la selección “Oranje” por el gran resultado conseguido: “Deben estar orgullosos de ustedes mismos, porque han logrado algo extraordinario, histórico para su país. Han entrado con mérito en la élite del pádel europeo y eso, más allá de todo, marca la diferencia y se reflejará en los próximos compromisos de su selección.” Luego, el presidente de la FIP felicitó a los italianos, uno por uno, y después a las chicas de Bélgica: “Han jugado un gran europeo, alcanzando un resultado histórico con las semifinales. Han luchado para estar aquí y se lo han ganado. Y no olvidemos que ustedes, como Países Bajos en masculino, al estar entre los cuatro primeros, están clasificadas directamente para las próximas Final 8 de la FIP Euro Padel Cup.”

La celebración italiana pasa por las palabras de Alvaro Montiel: “Dedico este gran resultado a mi padre, Gonzalo. Mudarnos a Italia fue decisivo para mí y para mi carrera. Tengo un pedazo de Italia en el corazón que late fuerte desde siempre, y cuando llegué a Turín esta conexión se hizo aún más fuerte. Amo profundamente esta camiseta…” Se entiende por las lágrimas del día anterior y por cómo “Alvarito” se ha integrado en el mundo azul. Flavio Abbate también celebra, pero con un toque de orgullo y nostalgia: “¿Contento por el bronce? Sí, pero sin olvidar que esta es una selección de medalla de plata.” Tras las dos victorias de las chicas Pappacena-Marchetti (6-2, 6-3 ante Pysson-Boeykens) y Orsi-Stellato (6-1, 7-6 contra Wyckaert-Mestach), llega el comentario de Marcela Ferrari, seleccionadora de Italia masculina y femenina: “Dos bronces y, con España a otro nivel, somos el único país europeo presente en ambos podios. Esto confirma la calidad de nuestros jugadores y jugadoras. ¿Cómo nos recuperamos después de las semifinales perdidas? Simple: el pasado es pasado, nos concentramos y ganamos las dos finales que quedaban.” Saverio Palmieri, asistente de Ferrari, hace balance: “Llevamos tres jugadores de veinte años a la selección masculina, y demostraron que el cambio generacional está funcionando. Montiel, Iacovino y Abbate son el futuro y tienen un gran camino por delante. ¿Las chicas? El año pasado llegamos a la final en el tercer partido decisivo contra Francia; este año la vimos escaparse igual, cuestión de momentos y detalles, pero Italia ha demostrado que sigue siendo Italia, sin duda.”

Y finalmente, Giorgia Marchetti, la italiana con mejor rendimiento del torneo, dice: “Ganamos el bronce y una vez más estamos en el podio. El pádel ha llegado a un nivel tan alto que hoy un solo detalle marca la diferencia, pero nosotras seguimos ahí.”

Países Bajos en masculino y Bélgica en femenino: el pádel amplía sus horizontes, los países crecen en nivel técnico y competitivo, y nuevos nombres aparecen en el horizonte de un deporte cada vez más global y espectacular.